SUEÑOS ESCRITOS
Él jamás hubiese escrito sobre ese tema concretamente por el desconocimiento que tenía sobre aquella materia.
El caso era que él no recordaba nada más que el momento en el que se sentó delante del papel y lo siguiente que recuerda fue que al despertar, delante de sus narices, se encontraba la hoja llena de palabras escritas con su letra.
Desde aquel día cada vez que cierra los ojos para dormir despierta con folios llenos de historias que él no recuerda haber escrito.
Cada vez que quería escribir algo ya sabía lo que tenía que hacer, era bien fácil, echarse a dormir y esperar que al despertar ya estuviera todo el trabajo hecho. Que forma más sencilla de ganarse la vida.
Al principio todo iba bien hasta que un día no podía dormir y aquel día no escribió nada. No le dio importancia, sería un hecho aislado, pero a esa vez le siguieron muchas más.
Os preguntareis si volvió a escribir algo, pues no, no fue capaz. Esto que estás leyendo fue lo último que escribió y por lo tanto su última cabezadita de su vida.
Felices sueños… felices cuentos.
Foto: LaguiadeSantiago.cl
4 Comments:
Qué importante es dormir bien y soñar, aunque algunos tenemos el problema de que al día siguiente no nos acordamos de nada de lo que habíamos soñado.
tendria que escribir todo lo que sueño ya que creo tener una vida paralela con ellos. me diste una gran idea y tal vez algun día mi vida tambien se valla en un sueño, mansamente...
fabi
Sin duda, es un escrito ingenioso y (¿por qué no?) con influencias freudianas.
A mí me suele ocurrir que no recuerdo lo que soñé... Pero sí sé que las veces en que recuerdo mis sueños, me inspiran muchísimo para escribir.
¡Qué maravillosa y misteriosa es la mente del ser humano!
Saludos desde Argentina,
Pablo
Si pudiesemos escribir mientras soñamos nos ahorraríamos más de un disguto, soy de las que piensan que morimos un poquito con cada poema y con cada prosa.
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